Día de la madre 2019

De niña no fui la más bonita con mi mamá, estaba loca enamorada de mi papá; en la adolescencia me tocó hacer fuerza (y de la maluca) para tener algo de emancipación, pero ya siendo adulta mi mamá fue lo mejor de  mi vida. No he conocido un ser humano más dulce y generoso, con más amor. Entendí que me amaba infinitamente, que era una mujer como yo quería serlo, que se había dedicado a construirme, a mostrarme la forma el camino, el modo. No aprendí todo, aún me falta mucho, pero vivir con ella, compartir con ella, charlar con ella, salir, o simplemente estar, fue lo mejor de ser una joven adulta… Ahora con el tiempo me parezco mucho físicamente, tengo sus manos, algunos de sus achaques y creo que heredé algunos detallitos de su infinito amor. 

Entonces aunque me hace mucha falta y me parece increíble no oír su voz y su forma de nombrarme celebro el regalo que la vida me dio, el que me da con su recuerdo, el que me da cada día al tener su timbre de voz, cuando veo mis manos recuerdo las suyas, cuando beso a mi niño sé cuanto me amaba. Celebro mi mejor mamá, y ya no es un día triste, porque ahora sé como ama una mamá y reconozco, celebro y agradezco su amor, agradezco su existencia, muy corta, pero trascendental. Gracias mami, te amo infinitamente. Te amo siempre. Feliz día por el amor que me das.